Esta forma sencilla y sin costo de volverse ecológico prolonga la vida útil de los recursos naturales. El reciclaje también reduce el efecto que los productos de desecho nocivos tienen sobre el medio ambiente.
Al reciclar, podemos disminuir la cantidad de contaminación que respiramos y limitar los gases de efecto invernadero que afligen la atmósfera de la Tierra. El reciclaje permite que los productos se vuelvan reutilizables, demandando menos energía y menos recursos que los requeridos para los productos nuevos.
Fuente: greenfaith.org