Si estás tranquilo, tendrás hijos más tranquilos Lo ha escuchado de casi todos los padres: “La crianza de los hijos es el trabajo más difícil del mundo”. Pero añadamos que también es la más gratificante.
Mantener la calma en tiempos difíciles no solo es bueno para nuestro propio bienestar, sino también una lección maravillosa para nuestros hijos, quienes a menudo reproducen cómo los padres actúan y se comportan con todo. Entonces, cuando esté en problemas, respire profundamente, recuerde que esto también pasará, y demuestre una sensación de calma y control.
Cuanto más tranquilo estés, más tranquilos estarán tus hijos.
Cuídese usted mismo porque es difícil cuidar a sus hijos cuando no se ha cuidado primero a sí mismo. Para ser el mejor padre que pueda ser, debes asegurarte de estar en tu mejor momento. Así que haz ejercicio, come bien, toca música y practica técnicas de relajación. Sus hijos merecen un padre feliz y saludable.
Deja de intentar ser perfecto. No existe tal cosa como un padre perfecto, así que deja de aspirar a eso. Solo sé el mejor padre que puedas ser. Permítete cometer errores y muéstrales a tus hijos que esforzarse por hacer lo mejor es siempre el objetivo.
Dormir en una mañana de fin de semana Puede ser un lujo para la mayoría de los padres, ¡pero es imprescindible! Esto significa que un día durante el fin de semana, usted no tiene que ser el primero en despertarse. Tener más tiempo solo en la cama te ayudará a comenzar mejor el día y, de hecho, afectará tu estado de ánimo a lo largo de la semana.
Date un descanso de 10 minutos cuando llegues a casa del trabajo, ve a tu habitación solo durante 10 minutos antes de ponerte el sombrero de padre. Cámbiate de ropa, respira hondo o dúchate. Este breve descanso te rejuvenecerá para el resto de tu ajetreada noche. Aunque a sus hijos no les guste, es importante para tí y aprenderán a aceptarlo.
Respete un horario. Tener un horario regular para levantarse, irse a la escuela, llegar a casa del trabajo, cenar y acostar a los niños hace que el día transcurra mucho más tranquilo. La gestión del tiempo contribuye a un hogar más tranquilo.
Ten noches de cita. Mantén fresca tu relación con una noche de cita semanal o mensual. Una simple película y una cena con una conversación de adultos es un placer maravilloso. Un día tus hijos envejecerán, así que nutre tu relación.
Mantente conectado con tus amigos Pasas mucho tiempo organizando fechas de juego para tus hijos. Bueno, prepara algo para ti. Tú también mereces divertirte y relajarte.
Sea tú mismo Por supuesto que eres padre, pero sigue siendo tú mismo. Sé feliz contigo mismo, mantente fiel a tus emociones y sigue tus sueños y ambiciones. Permita que tus hijos vean quién eres como persona, no solo como padre.
Relájate. No todo es una emergencia. Algunas cosas pueden esperar. Así que respira hondo y disfruta de esta montaña rusa llamada paternidad.
No grites, sólo habla. Es mucho más fácil para las personas, incluidos tus hijos, escuchar una voz firme pero tranquila que una voz que grita. Haz que tus palabras, no tu ira, sean el centro de su atención.
Fuente: beliefnet.org